En el Tablero de Cronos ya habíamos mostrado cómo subestimaban a Trump, y por qué la campaña se desarrollaba a su favor. También dimos algunos de los hechos que mostraban los pies de barro de Hillary Clinton. Como al Tablero no le sorprende el resultado, se asombra de que en los medios sociales y la gente de calle dedicaran tanto tiempo al tema, muchos lamentándose. Muy a pesar del autor, que no le gusta repetir mucho un tema, diremos algo de por qué no hay que alarmarse tanto (no más de lo que debieron estarlo en todos estos años) por la subida de un nuevo presidente del imperio. Aprovechará para escribir par de líneas sobre la solución del "menos malo". En Estados Unidos gobierna una plutocracia:
Ahí está el título y casi está dicho todo. Para Trump ser candidato necesitaba el apoyo de una parte del "sistema", que le confió el trabajo de impulsar sus particulares intereses en el gobierno. Sin embargo, la plutocracia estadounidense es muy sólida y coordinada, que vela por sus ideas generales primero que sus particulares. Podríamos llamarlo una forma de nacionalismo "aristocrático". Los cambios que tratará de impulsar Trump serán coordinados por ese grupo de personas, que lo controlarán a él y a su equipo de trabajo. La diferencia con los "lobbistas", grupos de presión política, es que esos últimos presionan con dinero e influencia, mientras los de antes pueden presionar con cualquier medio si lo ven necesario. Normalmente no necesitan emplear nada llamativo, pero pueden hacerlo si lo estiman conveniente. Y esta plutocracia no suele pelear entre ellos. Supone el Tablero que algún día lo habrán hecho, pero no es corriente y no se espera tal cosa al corto plazo. Ganara Hillary o Trump, los cambios político-económicos serían cosméticos. Ganó Trump, y aquello no cambiará. OJO: el que sean cosméticos no quiere decir que no sean LLAMATIVOS. Al igual que el maquillaje, hay ciertas cosas que la generalidad toma por definitivo, sin fijarse que lo que hay debajo es mucho más importante. Estados Unidos participa HOY en guerras a los largo de medio mundo... ¿y se preocupan por un supuesto muro que de todas maneras ya está y no sirve para nada? Muy cortos de miras. ¿Hillary mejor que Trump? Entre los seguidores de Hillary y entre los que leen los medios masivos habituales hay una especie de congoja y creencia de que se ha elegido algo mucho peor. Como si Hillary significara algo positivo y Trump un retroceso. El Tablero de Cronos solo puede achacar tales opiniones a ignorancia. Mucha culpa es de los medios masivos, en los que esa gente confía. Hillary y su equipo robó las elecciones primarias de su partido, en complicidad con la dirigencia de este. Para política interna, para la democracia, ese único hecho debía descalificarla. Su opinión sobre los tratados de libre comercio a cambiado tanto como los años que tiene en la política. Apoyó activamente los rescates a los especuladores de Wallstreeth y la regulación mínima al sector financiero. Se abstuvo de arriesgar capital político o criticar la política migratoria de Obama, que ha deportado más de dos millones de indocumentados (a Serbia la bombardearon por deportar 10,000); pero se rompe el pecho por el muro de Trump, como si hoy en día no existiera tal muro. Lo que más debería preocupar a la gente es su política exterior, y es justo en ese punto que el historial de Hillary la condena. El de Trump es una incógnita, pero el autor opina que solo debe condenarse a quien ya merece ser condenado, no "preventivamente" a futuro. Hillary es un halcón que apoyó todas las guerras, invasiones y bombardeos de EU, y directamente estuvo implicada en la destrucción de Libia, donde quedó inmortalizada con su "We came, we saw, he died" (quedará para la historia). No le interesa mucho latinoamérica, pero cuando tuvo que pronunciarse apoyó el golpe de estado en Honduras y Paraguay. Al gobierno de Venezuela no lo puede ver y con Cuba es de la vieja escuela. La técnica del "menos malo": El Tablero de Cronos no descarta la movida de principio. Pero hay que saber cuando usarla, tener los objetivos claros, el tiempo de ejecución... en fin, que no se convierta en costumbre ni política. En este caso ambos candidatos eran tan malos que votar por cualquiera era una pérdida de tiempo. ¿No se puede aprovechar eso en otra cosa? Y resulta que sí, que había otras opciones. La candidata del partido verde tenía mejores ideas que cualquiera de los dos. No iba a ganar, y los medios ni la mencionan (el bipartidismo del imperio es terrible y centenario). ¡Justamente por eso debía aprovecharse la ocasión para auparla! La población se desanima por votar a quien no tiene esperanza. Pero si subiera un poco, en la siguiente elección unos más podrían pensar en votar a ese partido, al menos para conseguir gobiernos regionales. Y de peldaño en peldaño intentar escapar de la trampa bipartidista. ¡Objetivo al mediano y largo plazo! Muy lamentablemente se desperdició la oportunidad y el partido verde apenas rozó el 1%.
2 Comments
Leticia
11/11/2016 07:01:52 am
Ciertamente no hay mucho de que sorprenderse, más bien el punto es que todo mundo se siente ofendido de que vayan a correr a los inmigrantes ilegales del país, como si ellos mismos estuvieran planeando convertirse en uno de ellos. Eso es lo que les asusta. Pero siendo sinceros, ¿podrá hacerlo, tiene un plan especial para detectarlos? Si llevan años ocultándose del sistema, no veo una manera mágica de que logre sacarlos sin más. En cuanto a lo que dices del muro, es bien cierto que no sirve para nada la cosa, siempre habrá algún listo que le haga un hoyo o lo brinque. Yo francamente no le veo nada distinto a los anteriores mandatarios.
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jhr cronos
17/11/2016 12:16:50 am
Obama deportó casi 3 millones durante su mandato. Trump quiere hacer otro tanto, y no estaría descubriendo nada. Muchas otras opiniones de Trump son más peligrosas y dañinas que este asunto de los migrantes ilegales.
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